Clara Sánchez
Editorial Destino
Colección: Áncora y Delfín, 1176
1ª edición, febrero de 2010
432 páginas
ISBN: 978-84-233-4251-8
"¿Sabes cuánto hay que matar para ser digno de una cruz de oro?". Ésta es una de las preguntas que Julián, un superviviente del campo de concentración de Mauthausen, le lanza a Sandra, una joven que ha sido acogida por una pareja de ancianos noruegos, aparentemente inocentes, pero que ocultan un atroz pasado.
Lo que esconde tu nombre, novela ganadora del Premio Nadal 2010, es un thriller en el que un octogenario cazanazis busca saciar su sed de venganza con aquellos que lo sumieron en el terror más despiadado en Mauthausen.
Como thriller, la novela parte con un handicap, y es que el lector sabe desde el principio qué secretos ocultan cada uno de los personajes y, por tanto, la intriga es relativa. A lo largo de la historia no se produce un giro en la trama que resulta necesario para que el thriller sea efectivo. Dicho de otro modo, la información que tiene el lector en la página cien no varía demasiado de la que tiene en la 350.
Los personajes están, en general, bien perfilados y la prosa de Clara Sánchez anima a seguir leyendo, pero hay algunas situaciones y comportamientos de los personajes que alejan al lector de la historia (la aventura amorosa que vive Sandra en Alicante me parece demasiado inverosímil, así como algunos nexos entre personajes, que me resultan muy novelescos). Además, el desenlace, la culminación que espera el lector con ansia para encontrar la sorpresa, cede demasiado margen a la casualidad. No acaba de encajar que, tras una narración tan pausada, llegue un final tan precipitado y forzado. Lo dicho antes, la trama debía luchar contra un handicap inicial: aguantó el tipo, pero se dejó vencer en el último asalto.
1 comentario:
Totalmente de acuerdo. De hecho, las situaciones inverosímiles ya aparecen al principio de la novela. ¿Unos nazis que viven ocultos en España acogerían en su casa a la primera desconocida que encuentran en la playa y le hablarían de la Hermandad con esa naturalidad? Y sí, yo también noto ciertas prisas de la autora a la hora de resolver el desenlace. Como si se le acabara el tiempo para presentarla al consurso.
Publicar un comentario